En Lodging Management sabemos muy bien cómo gestionar un piso turístico en Barcelona para que tu estancia en la ciudad sea inolvidable. No en vano, nuestros servicios acumulan extraordinarias calificaciones en portales como Airbnb o Booking, que avalan la calidad de los servicios que ofrecemos desde hace más de 15 años. No cabe duda de que aparte de nuestra profesionalidad y buen hacer reconocidos contamos con una ventaja adicional: la nutrida oferta de una ciudad privilegiada como Barcelona, con un clima suave e inigualables atractivos culturales y turísticos. De entre los numerosos lugares que debes visitar aprovechando tu estancia, hoy queremos recomendarte especialmente uno: el mercado de la Boqueria.
Aunque una vez establecido en tu piso turístico en Barcelona tu primer objetivo sea disfrutar de la ciudad visitando monumentos y acudiendo a restaurantes para degustar la gastronomía local, hay veces que necesitas empaparte del ambiente, sentirte un ciudadano más y vivir sus costumbres. Para eso, ¿qué mejor que ir al mercado, comprar productos de la tierra y preparar en la cocina de tu apartamento turístico una exquisita receta típica? Si te convence el plan, no puedes perderte este delicioso mercado al que cada día acuden miles de barceloneses no solo para comprar productos, sino también para maravillarse con la belleza de un enclave que es en sí un auténtico monumento.
El mercado de la Boqueria, efectivamente, está considerado uno de los mejores del mundo: por su entorno, su extensión, la variedad de productos que ofrece y por su indudable encanto estético. Situado en el mismo lugar donde estuvo el Convento de San José (de ahí que reciba también el nombre de Mercado de San José), fue construido a mediados del siglo XIX tras el incendio que sufrió el templo. La ubicación era privilegiada: a pie de Las Ramblas, en pleno centro de Barcelona. Poco después, los comerciantes iniciaron la costumbre de regalar una flor a los compradores, origen de las famosas floristerías que invaden el mítico paseo que corona la plaza de Cataluña y que se han convertido en un reclamo más para los visitantes.
Arquitectónicamente, la Boqueria es de marcado estilo modernista. Su portada, inspirada en Gaudí, fue realizada en 1913 por el arquitecto Antoni de Falguera. Consta de ornamentos de vidrio azul y círculos amarillos con el escudo de la ciudad en medio que dan paso a una enorme estructura de hierro —el mercado propiamente dicho— que alberga cinco cuerpos idénticos con una extensión total de más de seis hectáreas. Allí puedes pasear, confundirte con el gentío local y maravillarte con los innumerables puestos: puedes encontrar de todo, desde productos autóctonos y exóticos hasta animales y plantas.
Así que si estás disfrutando de tu piso turístico en Barcelona y un buen día quieres preparar una receta tradicional catalana (como la escalivada, el empedrat o la coca de recapte), o bien echas de menos la gastronomía de tu país, no dudes en acercarte al mercado de la Boqueria, dejar que los comerciantes te asesoren y comprar todo lo que necesites. Si no tienes ganas de cocinar, también puedes degustar los platos de la tierra en muchos de sus establecimientos, ya sea consumiéndolos allí o llevándotelos a tu apartamento para paladearlos con tranquilidad y rodeado de la comodidad que siempre ofrecen los inmuebles turísticos que gestiona Lodging Management. ¿A que es buena idea?